Tuvieron que pasar 10 temporadas para que los Medias Rojas de Boston barrieran una serie a los Yankees de Nueva York en el Yankee Stadium.
Boston se llevó los tres partidos de esta primera serie de la temporada, al vencer a sus archirrivales de Nueva York por pizarra de 5-2 el viernes (G: Eovaldi – P: King), 7-3 el sábado (G: Whitlock – P: Green) y 6-5 el domingo (G: Barnes – P: Cessa).
La última vez que esto había sucedido fue en la temporada de 2011, cuando los Medías Rojas dieron cuenta de los Yankees del 7 al 9 de junio. En aquella ocasión los partidos terminaron de la siguiente manera:
- 7/6/2011: Medias Rojas 6-4 Yankees.
- G: Jon Lester – P: Freddy García – SV: Jonathan Papelbon.
- 8/6/2011: Medias Rojas 11-6 Yankees.
- G: Tim Wakefield – P: A.J. Burnett- SV: Alfredo Aceves.
- 9/6/2011: Medias Rojas 8-3 Yankees.
- G: Josh Beckett – P: CC Sabathia.
Luego de esta barrida, la áspera prensa y fanaticada de Nueva York, han empezado a pedir cambios en el equipo; empezando con jugadores, coaches y hasta directivos.
Aunque queda mucha tela que cortar esta temporada, los Yankees están notando más que nunca su falencia en su columna vertebral, pues necesitan un catcher de confianza, un campo corto seguro y un jardinero central de garantías.
Porqué digo esto, Gary Sánchez no está pasando por un buen momento desde hace rato, Gleyber Torres juega en una posición que no es la suya y desde la lesión de Aaron Hicks, Nueva York lleva improvisando a varios jardineros en la posición de center. Aunado a esto, hay que agregase la nueva lesión de Luke Voit, que le resta otro bate de poder al equipo.
Los Yankees han entrado en un pequeño bache nuevamente y ahora más que nunca necesitan que su pitcheo se recupere (Cole y Cía) y que jugadores como DJ LeMahieu, Gleyber Torres y Gary Sánchez, empiecen a traer corredores a la registradora.
Es cierto que urgen cambio en los Yankees y desde ya deben empezar a mirar que opciones hay en el mercado en las posiciones que anteriormente hemos mencionado.
La temporada es larga, pero en Nueva York saben que no pueden permitir que Tampa y Boston, se alejen demasiado en la división.